Traducción de la versión francés publicada en la "Revue Musicale Suisse" 12 / 2005
 

Nicole Coppey

Que es el arte ...quién es artista...?

Música, movimiento, pintura, poesía, arquitectura, escultura..., tanto modos de expresión artística. Pero, que es el arte... quién es artista...?

El arte, emanación humana y universal surge de un encaminamiento intenso y profundo en el seno de la persona humana. Ello implica al ser entero ya que llama a la vez a todos los sentidos y a la razón. El artista real es según mi opinión, aquel que hace resonar en lo mas profundo de su ser el arte y la belleza que lleva en su interior y los comunica a través de la autenticidad de su persona. Podríamos ver la imagen de su producto en una cuerda magnificado por el alma, y el cuerpo de resonancia de un violoncello.

Al comienzo, el artista trabaja con un materal de base, es decir: sonido, materia, formación, técnica, percepción sensorial, modelo, idea, concepto, mensaje... Como el escultor o el Luthier buscando un material de primera calidad para su obra, el arte debe resultar y nacer de una intención objetiva, apoyándose sobre un soporte de calidad, capaz de pasar a través de las generaciones (esto es tan cierto en las obras efímeras en las cuales la memoria queda inmaterial pero a su vez durable...). Solo podemos construír teniendo buenas bases.

Materiales perfectos para un resultado perfecto?

La perfeccción no es, sin embargo, el solo objetivo del arte. ”L’art pour l’art” proclamado por Théophile Gautier tiene sentido solo si el queda encarnado y guarda su dimensión humana que lo presenta perceptible. Ya sea necesaria la calidad de base esto sin embargo no es garantía de su magnificencia. La imperfección nos recuerda en el arte su dimensión humana, lo que representa habitualmente todo su encanto natural. La técnica está al servicio de la expresión artística y la condiciona, como el material impone sa lógica formal en las artes visuales. ”El sentido artístico no es algo mecánico, comentaba el pianista Tamás Vásáry. Usted no es un computer...y si estamos muy concentrados en la precisión, se pierde la esencia del arte, que es la emoción, sentir algo y comunicarlo. Principalmente algo unido al amor. Y entonces, como sentir y percibir el amor si actuamos como un caballo de carreras o un computer?”

Sin embargo, la virtuosidad queda como un medio importante de exprimir toda la paleta de sentimientos. Liszt iría inclusive mas lejos:” La música no exprime sentimientos, ella es en sí sentimiento”. La obra del arte es inspirada por el amor infinito, con todas sus alegrías, dolores, los sentimientos, en todas las manifestaciones y matices que una persona puede sentir. Provoca la emoción, parte integrante de la vida. Neutralizar los sentimientos y emociones en el arte es cortar esa unión vital que lo acerca a la naturaleza humana. A su manera, cada manifestación artística busca esa emoción.”Así como un músico puede expresar sus impresiones y emociones sobre el amanecer sin utilizar el sonido del gallo, el pintor dispone de medios puramente relatados a la pintura para vestir sus impresiones de la mañana sin pintar un gallo”(Kandinsky).

El arte y la obra musical

Como en las otras artes, la música ayuda a el alma humana a percibir las nociones universales. A través de sus componentes rítmicos, melódicos y armónicos, la música se sobrepasa en esta función. El ritmo le da vida (movimiento, pulsación cardíaca)evoca los tiempos y la duración, define la unidad, la división y la interrelación. La melodía, menos definible, lleva las emociones y habla a nuestras emociones de una manera irracional. Finalmente, la armonía, coloca el cuadro de referencia (sistema tonal) basado en las proporciones universales, dejando exprimir los colores de cada tonalidad.

La obra musical es a la fin una suma y combinación compleja reuniendo formas, movimientos, colores, sonidos, sueños, poesía, plasticidad, sentido del espacio y temporalidad, todo ello en una verdadera obra arquitectónica musical. El artista debe en consecuencia se encaminar en ello para encontrar son esencia y poder comunicar las emociones que de ello emanan.

Nada de sorprendente si los artistas mismos son habitualmente atraídos por otras manifestaciones artísticas. Los pintores, por ejemplo, han particularmente desarrollado su sensibilidad al contacto de la música: Veronêse, Delacroix, Kandinsky. Schumann proponía al músico cultivado de estudiar una Madone de Raphael y al pintor una sinfonía de Mozart. Debussy, atraído por el arte de la pintura, se proponía “de hacer una obra con colores especiales y debiendo dar el máximo de sensaciones posibles”.

El arte es una misión

Si entonces, concebimos que una obra musical es una combinación artística, porqué no hacer una unión todavía mas perceptible con las otras manifestaciones artísticas con la finalidad de que cada uno, con su propio modo de “reacción” reciba un mensaje profundo?  El ser humano, de hecho “polyvalent”, porqué entonces no le proponemos varios y diversos modos de percepción en el seno mismo de un concierto?

Desde la inauguración hace 8 años, de nuestra escuela “Un, Deux, Trois Musiques...” en Sion, nosotros proponemos una pedagogía artística basada sobre la música y la persona, desarrollando no solo el sentido musical sino también los dones de expresión artística y la creatividad. De esta manera, hemos creado horas musicales basadas en temas pedagógicos como: música y ... pintura, ... poesía, ...literatura, ...escultura,  ....gastronomía, ... lenguajes, ... movimiento, ... Todos estos temas aportan no solamente una entrada indiscutible a el arte global sino que nos esfuerzan a la vez a observar el arte como un todo, produciendo un conjunto de emociones complementarias.

Puede leer el artículo en frances en la "Revue Musicale Suisse" di Diciembre 2005 página 13